Hoy, para empezar la semana, una de pollo.
La salsa de queso está hecha en la
thermomix, pero siguiendo el mismo orden y teniendo cuidado con los tiempos y
las temperaturas, la podemos preparar igualmente en una cazuela.
Ni que decir tiene, que esta receta no es
apta para aquellos a los que no les guste el queso. Nosotros somos adictos al
queso!!
Espero que os guste:
Ingredientes:
- Una pechuga de pollo o de pavo.
- Harina.
- Aceite de oliva.
- 50g de cebolla.
- 1/2 pastilla de caldo.
- Un vaso de agua.
- Medio vaso de vino blanco.
- 2 ó 3 cucharadas soperas de queso rallado.
- Sal.
- Pimienta negra.
Elaboración:
- Partir la pechuga en trozos (ni muy grandes ni demasiado pequeños).
- Salpimentar, pasar por harina y freír en una sartén con aceite de oliva.
- Poner en el vaso la cebolla y triturar 2ó 3 segundos velocidad 4.
- Añadir un poco del aceite en el que hemos frito las pechugas. Programar 3 minutos, 100º velocidad 1.
- Agregar media cucharada de harina y programar 2 minutos, 90º, velocidad 4.
- Añadir 1/2 pastilla de caldo (yo usé una cucharadita de mi caldo casero concentrado), el vino blanco, el queso y el vaso de agua. Programamos 2 minutos, 90º, velocidad 5.
- Una vez terminado el tiempo agregar el agua que creamos necesaria para dejar el espesor de la salsa a nuestro gusto y mezclar de nuevo 10 segundos velocidad 9.
- Mezclar esta salsa con el pollo reservado y dar un hervor todo junto 5 minutos, 100º, giro a la izquierda, velocidad cuchara.
- Este último hervor conviene darlo justo en el momento antes de comer.
¡¡QUE TENGÁIS UNA FELIZ SEMANA!!
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